Son tantas veces las que he ido a visitar Segovia… e incluso he pasado varios días seguidos allí, por el gusto de disfrutar tanto de sus calles, como del ambiente, de día y de noche, de sus monumentos, de su alameda y las distintas rutas que allí se encuentran. Siempre hay algo por descubrir en Segovia. Una de las “espinitas” qué tenía, era la Iglesia de La Vera Cruz (Monumento Nacional en 1919), ya que las veces que quise visitarla, estaba cerrada. Hasta hace unos meses que por fin, pude entrar…
Por fuera no dice mucho, pero al entrar, te das cuenta enseguida de la riqueza y la importancia de esta iglesia. Se levantó en el año 1208 y según las últimas investigaciones, se cree que fue levantada por la Orden del Santo Sepulcro, dependiente de la Colegiata de Toro (Zamora). Dicha Orden se unió a la de San Juan de Jerusalén en 1531, quedando bajo el dominio de esta última.
Soberana Orden Militar Hospitalaria de San Juan de Jerusalén, titulada de Rodas y de Malta.
La planta dodecagonal de la iglesia tiene la misma forma que la de los baptisterios romanos de los primeros años del Cristianismo, habitual en las construcciones de realizaban los caballeros de las distintas órdenes, fundadas por los Cruzados en Palestina.
«En el centro se produce un fenómeno acústico que, ante cualquier sonido, se produce una curiosa resonancia».
«La nave está decorada con banderas de la Orden de Malta, una institución católica, de carácter militar y hospitalario, y de tradición nobiliaria».
«A la izquierda, El Retablo de la Resurrección. A la derecha, la Capilla de Lignum Crucis»
Más información sobre la Orden de Malta.
Más información sobre la Iglesia de La Vera Cruz.
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