Un mes no es demasiado tiempo, pero si el suficiente para saber si realmente eres capaz de vivir fuera de tu zona de confort, y si en un futuro serías capaz de volver a irte por más tiempo.
Por fin me vi con tiempo y dinero ahorrado para poder realizar esta estancia, y que mejor país que Inglaterra para poder mejorar a diario mi nivel de inglés en una escuela; seguir hablando inglés con mis compañeros y gente local después de las clases, y el fin de semana conocer nuevos lugares.
Me remito de nuevo a las tres primeras líneas con las que comencé esta publicación: un mes no es mucho tiempo pero si para probarte y conocerte a ti mism@. Saber si eres capaz de sacarte “las castañas del fuego” tú sol@, en un país que no es el tuyo, con gente que muchas veces no te va a entender y que tiene otras costumbres.
IDIOMA
En cuanto al idioma, lo ideal sería ir con un nivel pre – intermedio o intermedio. Mi objetivo era alcanzar “x” nivel para a mi regreso prepararme el examen oficial de la universidad. Como tenía clara mi meta estuve más de un año preparándome por mi cuenta (y sí, se puede) viendo películas, estudiando vocabulario y repasando la gramática (aún continuo con esa dinámica).
Esto requiere de mucha constancia pero como dice el dicho “el que algo quiere, algo le cuesta”. Cuando se acercaba la fecha, un mes antes de irme comencé a realizar distintas pruebas de nivel a través de páginas oficiales para comprobar si realmente alcancé el nivel que me había propuesto y, aunque es orientativo lo conseguí. Cuando llegué a la escuela me hicieron una prueba escrita y oral, y me pusieron en un grupo acorde a mi nivel de inglés (el que me había preparado durante meses).
EXPERIENCIA Y NUEVOS DESTINOS
¡No todo era estudiar! Cada tarde había un plan para conocer cada rincón de Liverpool y conocer gente nueva: salsa, yoga, fútbol, pub night, tour por Liverpool, disco night… Y los fines de semana organizaban distintas excursiones para visitar nuevas ciudades; Londres, York, Gales… Entre semana o en fin de semana me iba por mi cuenta o con mi grupo de internacionales a visitar otras ciudades a nuestro aire (Chester) o lugares cercanos a Liverpool (Crosby Beach), íbamos a nuevos restaurantes o a conocer nuevos pubs donde poder conversar.
Como podéis ver le doy importancia a la experiencia en el extranjero en solitario, pero aún se la doy más a la necesidad de alcanzar un nivel de inglés aceptable, tanto para una experiencia así como para viajar con tranquilidad.
Conclusión: si aún estáis dandole vueltas a este asunto, entre si realizar o no una larga o corta estancia en el extranjero en solitario, mi respuesta es la siguiente: HAZLO.
No voy a decir que todo es de color rosa cuando viajas en solitario ya que una vez que coges el avión, todo depende de ti, pero finalmente el balance es positivo: conoceréis a gente nueva de diferentes países y de todas las edades, mejoraréis el idioma (cogeréis oido y soltura al mantener una conversación), visitaréis nuevas ciudades, pueblos y parques naturales, conoceréis otras costumbres, ganaréis confianza en vosotr@s mism@s, ¡aprenderéis a cocinar! …
Da igual la edad que tengáis, ¡no os pongáis trabas vosotr@s mism@s!: ahorrad dinero, preparaos bien el idioma, buscad un país que se adecue a lo que estáis buscando y un lugar donde vivir aceptablemente durante ese tiempo. De una experiencia así solo sacaréis cosas positivas.
…
¿QUÉ LUGARES VISITÉ DURANTE MI ESTANCIA EN LIVERPOOL? 😉
LIVERPOOL | ITINERARIO PARA VISITAR LA CIUDAD EN 3 DÍAS
CHESTER | UNA CIUDAD PRECIOSA EN LAS MIDLANDS DE INGLATERRA
LAGO WINDERMERE, BOWNESS Y AMBLESIDE | RUTA EN BARCO Y PUEBLOS DE ENSUEÑO
Donde Finaliza el Norte 